Bienvenido al Valle de Itria

Despertarse en un trullo del valle de Itria y dejarse arrullar por el aire fresco del campo que sopla a través de los trullos del pueblo. Casi sentir a los antiguos habitantes trabajando en la granja y a los animales pastando en las terrazas que descienden hacia el valle. Pasear por las callejuelas, apretujados entre los anchos muros de piedra que se superponen a chianches de conos blancos. En las colinas que se elevan suavemente desde el mar, la gente anima los pueblos entre mercados y fiestas.

Cisternino, Martina Franca, Alberobello, Ostuni, Ceglie Messapica y más allá, Salento llamando a la puerta del valle del Karst. El equilibrio entre la calidez de los rayos del sol y el frescor de la mesa de piedra en el huerto de olivos te acompañará hasta dejarte atrapar por los colores del sol que, ahora que está bajo, pinta el cielo sobre el Valle de Itria de rojo y mágico.